Povos indígenas e comunidades afrodescendentes em processos políticos e jurídicos ante o Estado e empreendedores privados: olhares sobre a América Latina hoje
Alexandra Barbosa da Silva y Emmanuel de Almeida Farias Jr. (compiladores) (2024). Este libro surge de un GT “Pueblos indígenas y comunidades afrodescendientes en procesos políticos y jurídicos ante el Estado y los emprendedores privados: miradas desde Latinoamŕica y el Caribe” de la Asociación Latinoamericana de Antropología (ALA), integrado por investigadores de Brasil, Argentina, Colombia, México y Chile, desde agosto de 2021. El enfoque del grupo estaba centrado en abordar los impactos de proyectos estatales y/o privados en comunidades indígenas y afrodescendientes, dando espacio para comprender cómo estas comunidades han respondido a estos impactos. Se destaca el concepto de neoextractivismo de Maristela Svampa como una clave analítica para entender los fenómenos que han marcado la región en las últimas décadas. Los trabajos reunidos abordan diversas dinámicas, como la expropiación territorial, la gestión de recursos y la resistencia de comunidades indígenas y afrodescendientes frente a estos procesos.
Los artículos incluyen estudios sobre los Kaiowa en Brasil, la situación de los pueblos indígenas en Argentina, la lucha de comunidades negras en Brasil por el reconocimiento de sus territorios, el ejercicio del autogobierno indígena en Michoacán, México, y la disputa legal de comunidades quilombolas en Alcântara, Maranhão, Brasil. Estos trabajos ofrecen reflexiones sobre las complejidades de las relaciones de poder, la implementación de políticas públicas, la criminalización de comunidades indígenas y afrodescendientes, y la importancia del conocimiento local en la defensa de los derechos territoriales.
El libro busca proporcionar, entonces, una visión amplia y detallada de los desafíos que enfrentan las comunidades indígenas y afrodescendientes en América Latina y el Caribe frente a la expansión extractivista y otros proyectos de desarrollo. Además, destaca la importancia del diálogo interdisciplinario y la colaboración entre investigadores y comunidades locales para comprender y abordar estos desafíos de manera efectiva.